Este pequeño y acogedor hotel rural, fue en otro tiempo, como su nombre nos indica, el lugar destinado a guardar el grano.
El hotel es la típica construcción serrana, en la que la piedra, madera, y barro en forma de adobe y tapial se han ido combinando a lo largo de los siglos.
En su restauración, siguiendo las técnicas de construcción de la zona, se han procurado mantener todos los elementos y las estructuras originales, quedando en perfecta armonía con el entorno.
La parte más antigua de la casa data del siglo XVI y conserva en su parte baja dos antiguas cuevas medievales escavadas en la roca.
Cuenta con cuatro habitaciones con una decoración mimada, cada una de ellas crea una atmósfera especialmente armoniosa.
En la planta inferior encontramos un salón en el que podremos derleitarnos con largas tertulias cerca de la chimenea. Un concepto de alojamiento donde conviven el diseño, el confort y la tranquilidad.
Este hotel es ideal para disfrutar del equilibrio y la serenidad del Valle del Cabriel.
Esta amplia habitación tiene como color predominante el amarillo. Cuenta con íntimo y acogedor salón con chimenea independiente del dormitorio.
El baño atesora una ducha de hidromasaje que hará que nuestro día acabe de forma relajada.
969 34 80 24 info@casaelatroje.com
Esta amplia habitación tiene como color predominante el verde. Cuenta con íntimo y acogedor salón con chimenea independiente del dormitorio.
El baño atesora una ducha de hidromasaje que hará que nuestro día acabe de forma relajada.
969 34 80 24 info@casaelatroje.com
Esta amplia habitación tiene como color predominante el rosa. Cuenta con íntimo y acogedor salón con chimenea independiente del dormitorio.
El baño atesora una ducha de hidromasaje que hará que nuestro día acabe de forma relajada.
969 34 80 24 info@casaelatroje.com
Esta amplia habitación tiene como color predominante el azul. Cuenta con íntimo y acogedor salón con chimenea independiente del dormitorio.
El baño atesora una ducha de hidromasaje que hará que nuestro día acabe de forma relajada.
969 34 80 24 info@casaelatroje.com
En la misma localidad de Cardenete, muy cerca de la casa rural, se encuentra el restaurante La Rebotica. Una antigua y rústica casona tradicional, adaptada para su nuevo uso, la antaño Casa de Boticaria es en la actualidad uno de los restaurantes
con más encanto de la provincia de Cuenca. Sus gruesas paredes de piedra, vigas y entramados de madera, sótano (hoy reconvertido en bodega), y un sinfín de pequeños detalles, convierten a este establecimiento en visita indespensable para los amantes del buen gusto y del buen comer.
Su cocina se basa en los productos y en los sabores más tradicionales de la comarca, así como su amplia carta regada con vino de las mejores D.O, una variedad de postres deliciosos, todo ello combinado con los platos más innovadores. Excelente trato con el cliente y estancia muy acogedora.
Recientemente, ha obtenido el segundo premio en la categoría de "Cocina castellano-manchega tradicional" en el II Concurso de Gastronomía Aplicada a la Restauración de Castilla La Mancha.
Calle Iglesia, 27, 16373 Cardenete969 34 80 24
En la comarca de la serranía, a 65Km de Cuenca, se encuentra el noble pueblo de Cardenete. La localidad conserva el trazado antiguo de su época romana y varias muestras de arquitectura popular como sus casas serranas, con entramado de madera y otras casas - cueva excavadas en la roca, muy interesantes. En su conjunto urbano destacan la Plaza Mayor y la Iglesia de la Asunción.
Lo más llamativo de la plaza es que cuenta con una anteplaza, separada por el edificio del Ayuntamiento que se encuentra en el centro de la misma y que fue construido en el siglo XVIII.
A un lado veremos la Iglesia, fiel testigo de la historia de este pueblo, construida y ornamentada entre los siglos XV y XVIII, por lo que guarda entre sus muros elementos góticos y renacentistas. Destacamos en ella su gran monumentalidad tanto en medidas como en proporciones, el bello artesonado que cubre su nave central, de estilo mudéjar renacentista y los frescos de estilo rococó que decoran la cabecera.
Además cuenta con un órgano de estilo barroco dorado y policromado, instalado en 1767, sobre el coro. Con tales elementos no sorprende que en 1983 fuera declara Bien de Interés Cultural.
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